En 1950 Javier Ibarra empieza sus andanzas en hostelería al unirse a su padre al cargo de “El Sotanillo”, casa de comidas alicantinas que se situaba en la Calle Lonja de Caballeros.
En 1970, las ganas de crear un restaurante de mayor envergadura hacen que Javier inaugure “El Refugio” en el pórtico consistorial del Ayuntamiento. En muy poco tiempo “El Refugio” se convierte en referente de tapas típicas alicantinas. En 1983 se le une Laureano Pavón (Titín), yerno de Javier.
En 1985 Javier y Titín, ante el éxito que están viviendo, deciden renovar y ampliar montando “Casa Ibarra” en la Calle Altamira. Durante años la fama de nuestros platos va creciendo, y con ella nuestras ganas de innovar manteniendo el estilo tradicional que nos caracteriza.
Finalmente, en 2005, ante la necesidad de seguir ampliando para poder ofrecer el servicio que nuestros clientes se merecen, “Casa Ibarra” se traslada al local en el que nos situamos actualmente.
En 2018 se unen los hijos de Titín iniciando la cuarta generación y... ¡quién sabe qué nuevos retos podremos seguir contándoles!
En resumen, diferentes ubicaciones, pero siempre apostando por una cocina mediterránea tradicional, elaborando cada plato con el cariño de la comida casera.
Les invitamos a que conozcan nuestra carta gastronómica donde podrán elegir entre una amplia selección de tapas típicas alicantinas, los mejores arroces de la provincia, carnes o una variada selección de pescado fresco mediterráneo. ¡Disfruten!